martes, 8 de febrero de 2011

Salmorejo Cordobés de la cabeza a los pies!!


Hola compañer@s!
Para celebrar mi incorporación a este sorprendente blog voy a dejar por aquí la receta de mi Salmorejo cordobés. Es sencillo y sanísimo aunque de difícil digestión si no se guardan ciertas precauciones. Al tratarse de una receta casera los ingredientes han ido siendo objetivados por mí, por lo que recomiendo sucesivas catas para rectificar al gusto de la consumidora.
Detallo el proceso completo:
Tomaremos como recipiente de medida el vaso de la batidora turmix normal y corriente.
Añadimos dos dedos (en horizontal) de aceite de oliva virgen extra de mi pueblo, Baena (cualquier sustitución irá en detrimento del resultado). Una pizca de sal gruesa (agarrada en oposición de los dedos pulgar, índice y medio). Un diente de ajo, al que le debemos quitar la parte central (ese tallo-semilla que tiene) para que no pique y repita lo menos posible.
Un tomate muy gordo o dos medianos. Los tomates tienen que ser muy rojos pero duritos, las mejores variedades para el salmorejo son los de rama o los de pera. Si teneis maravillosos tomates de huerta, mejor que mejor. Mejor si se pelan los tomates para no encontrarte luego los pellejillos por ahí.
Un trozo de pan de unos 10 cm de largo por 5 de ancho. Como en Córdoba no hay pan oscuro del que hay aquí pues se usa un trozo de barra, de baguette o pan de miga blanca. Se puede usar el pan duro para reciclar. Se añade un chorrito pequeño de vinagre (el normalito, de vino blanco), si el pan estaba duro se echa el vinagre por encima para ablandarlo.
Se bate hasta que quede una salsa homogénea, se prueba y se rectifica al gusto de cada una. La consistencia debe ser tal como para poder comerlo con cuchara sin que se chorree. A mí me gusta mas bien tipo puré muy espeso.
Se debe acompañar con huevo cocido en daditos y pizquitos de jamón (añadir antes de servir el jamón que si no se queda blandurrio). Mi toque personal es batir junto a todos los anteriores ingredientes la yema del huevo cocido, para que el salmorejo quede cremosito.
Se puede comer a cucharada limpia, mojando el pan hasta dejar el plato brillante, servido en canapé.... pero como se ha comido en mi casa toda la vida es con tortilla de patatas (también lo tengo probado con bacalao ahumado y es una maravilla, pero perjudicial para el bolsillo). Servir 1/4 de tortilla de la Sra. Mercedes y una buena cucharada de salmorejo por encima.
Gloria bendita el salmorejo cordobés, de la cabeza a los pies!!